Cómo limpiar el oído de cerumen

El cerumen sirve para proteger la piel del oído de infecciones, la hidrata, y evita que puedan entrar cosas dentro del oído, como por ejemplo insectos.
El oído se limpia en el baño o la ducha. Está diseñado de tal forma que el agua que entra, es expulsado hacia el exterior, junto al cerumen de forma normal. 
No se recomienda el uso de bastoncillos , menos aún horquillas, patillas de gafas, palillos…..Son muchas la heridas que se producen en el conducto auditivo o en el tímpano por culpa de estos utensilios.
Entonces, ¿qué hago?
Pues te puedes limpiar la oreja con un pañuelo, o con la toalla, sin introducirte nada dentro del oído. Y con el dedo te puedes ir quitando los restos de cerumen que salgan hacia fuera.
¿Y si tengo un tapón de cerumen?
Hay gente que tiene tendencia a formar mucho cerumen, y en ese caso es más fácil que se formen tapones. También ocurre con el uso de bastoncillos, pues parte del cerumen que no se extraiga es empujado hacia al fondo, donde se acumula formando auténticos tapones. Suele ser en estos casos cuando puede el individuo notar una cierta pérdida de audición, pero no así en las personas con cerumen normal. 
limpiar sin entrar en el conducto
Cuando el cerumen está muy seco puede ser conveniente reblandecerlo, ¿cómo? Pues mezclando suero con agua oxigenada (mitad y mitad), y echando unas gotitas en el oído, manteniéndolas unos minutos. Se puede hacer 3 veces al día, durante 5-7 días. Y solo con esto muchas veces es suficiente, porque el tapón se disuelve. También se usan gotas de aceite.
En lugar del suero y agua oxigenada se pueden utilizar otros productos que venden en la farmacia. Algunos son útiles, otros caros, y otros peligrosos. 
Si todo lo anterior falla puedes ir a tu medico de atención primaria, y con un lavado lo extraerá. En algunos casos es necesario que sea el otorrinolaringólogo el que lo extraiga.

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